sábado, 24 de diciembre de 2022

Dejar ir...

 "Deja ir a la gente que no está lista para quererte esto es lo más difícil que tendrás que hacer en tu vida y también será lo más importante.

Deja de tener conversaciones difíciles con personas que no quieren cambiar.

Deja de aparecer para las personas que no tienen interés en tu presencia.

Sé que tu instinto es hacer todo lo posible para ganar el aprecio de los que te rodean, pero es un impulso que roba tu tiempo, energía, salud mental y física.

Cuando empiezas a luchar por una vida con alegría, interés y compromiso, no todo el mundo estará listo para seguirte a ese lugar.

Eso no significa que tengas que cambiar lo que eres, significa que debes dejar ir a las personas que no están listas para acompañarte.

Si eres excluido, insultado, olvidado o ignorado por las personas a las que les regalas tu tiempo, no te haces un favor al seguir ofreciéndoles tu energía y tu vida.

La verdad es que no eres para todo el mundo y no todos son para ti.

Esto es lo que hace tan especial cuando encuentras a personas con las que tienes amistad o amor correspondido.

Sabrás lo precioso que es porque has experimentado lo que no lo es.

Hay miles de millones de personas en este planeta y muchas de ellas las vas a encontrar a tu nivel de interés y compromiso.

Tal vez si dejas de aparecer, no te busquen.

Tal vez si dejas de intentarlo, la relación termine.

Tal vez si dejas de enviar mensajes, tu teléfono permanecerá oscuro durante semanas.

Eso no significa que arruinaste la relación, significa que lo único que la sostenía era la energía que solo tú dabas para mantenerla.

Eso no es amor, es apego.

Es dar una oportunidad a quien no lo merece!

Tú mereces mucho más.

Lo más valioso que tienes en tu vida es tu tiempo y energía, ya que ambos son limitados.

A las personas y cosas que le des tu tiempo y energía, definirá tu existencia.

Cuando te das cuenta de esto empiezas a entender por qué estás tan ansioso cuando pasas tiempo con personas, actividades o espacios que no te convienen y no deben estar cerca de ti.

Empezarás a darte cuenta que lo más importante que puedes hacer por ti mismo y por todos los que te rodean, es proteger tu energía más ferozmente que cualquier otra cosa.

Haz de tu vida un refugio seguro, en el que solo se permiten personas “compatibles” contigo.

No eres responsable de salvar a nadie.

No eres responsable de convencerles de mejorar.

No es tu trabajo existir para la gente y darles tu vida!

Te mereces amistades reales, compromisos verdaderos y un amor completo con personas saludables y prósperas.

La decisión de tomar distancia con personas nocivas, te dará el amor, la estima, la felicidad y la protección que te mereces" - Violeta Diaconu.

Puede ser una imagen de texto que dice "déjalo ir"
Tú y 5 personas más

jueves, 25 de agosto de 2022

Te quiero

 Cuando le dijo te quiero, a la segunda o la tercera noche, la vergüenza hizo que no se pirara corriendo de aquella habitación del caos.

Esta pava está como una cabra, pensó, mientras contaba las horas que quedaban para irse y no volver allí jamás.
Pero la pava, joder, era muy divertida, le había regalado momentos que habían encendido una hoguera que creyó estaba apagada.
Y cuando amaneció y ella, se levantó a por café, la pregunta "quieres uno?" Tuvo un sí por respuesta.
No sabía ni siquiera por qué decidió quedarse. Si todo apuntaba a que aquello no podía salir bien
Quién dice te quiero a alguien que acaba de conocer?
Y es que el que no la conocía, era él.
Al verla en bragas cantando, como si no tuviera miedo, como si la conexión presente fuera todo lo que tenía que ser, él sintió que en cierta parte, joder, también la estaba queriendo.
Y es que la palabra querer, se usa tan pocas veces, que no estamos acostumbrados a sentirlo y que se caiga de los labios temblorosos de quien piensa que escupir lo que uno siente es signo de debilidad.
Da igual que mañana te vayas, le dijo con la honestidad que pocas veces oyó.
Formas parte de mí historia y gracias por esta experiencia.
Él, calló como fue enseñado, y ella, no sintió rechazo ni abandono, tan solo sentía paz.
La paz de ser una misma y que se la pelara el mundo. La paz de hacer lo que quería cuando le daba la gana sin pánico a que se asustara quien no la aceptara así.
Porque no era para siempre nada de lo que ella hacía.
Todo era para ahora, y se negaba a mancharlo con todos los "por si acaso" que tanto le había costado poder mandar a la mierda.
Sabéis? Él al final se fue.
Y al oír cerrar la puerta, ella puso una canción y cocinó algo rico mientras seguía bailando
Una canción animada, y una lubina en el horno.
Él se acordó de ella 1520 veces.
Y ella no volvió a pensar en él, desde que acabó la lubina y recogió los condones que andaban por ahí tirados.
Y no es mentira que le quisiera, por mucho que cueste entenderlo.
A la 1521, sonó el teléfono.
-Qué haces? Me gustaría verte de nuevo
Ella miró la sartén, y solo había comida para uno.
- lo siento, cariño mío, pero no tengo nada que ofrecerte.
Y hoy me quedo conmigo, y me toca quererme a mí.
Al acabar las fajitas, sonó otra canción animada. Se levantó y la bailó, mirándose en el espejo.
Joder chavalita, qué bien es querer y quererte.
Y qué quieres que te diga... Que te quiten lo bailao.

Paula Marín Psicóloga



viernes, 18 de febrero de 2022

Mándalo a la mierda

* Ser amable con todo el mundo, en especial con los que no lo han sido contigo, es un súper poder y quiero que hagas uso de él porque nunca sabes por lo que está pasando la persona que tienes delante. No conoces su historia, sus miedos, ni sus heridas pasadas. Es por eso que, si vas a dejar a alguien, debes hacerlo con respeto y con tacto, aunque su reacción no sea la que te gustaría o lo estés mandando a la mierda porque no se ha portado bien contigo.

* Tienes más que suficiente contigo misma para ser feliz y no necesitar a un follamigo para que te caliente la cama o el corazón. Debes ser consciente de que ese tipo de relaciones nacen para ejercer de parches y cubrir carencias. O para huir de una situación que te da miedo, como podría ser la de abrir tu corazón y que vuelva a salir trasquilado.

* No eres consciente de ello, pero probablemente estás rechazando a un montón de candidatos que podrían enamorarte y hacerte feliz, pero que no tienen la oportunidad de darse a conocer porque no cumplen con algunas de las características de tu inacanzable lista, así que los rechazas sin molestarte a conocerlos.

* Cuando alguien te dice “no estoy preparado para una relación”, lo que realmente quiere decir es “ahora mismo no estoy preparado para tener una relación contigo”.

* Ese es el regalo que nos dan las relaciones fallidas: un nuevo corazón, hecho a medida para nuestra próxima pareja.

* La única forma de impedir que la química te empuje a iniciar una relación con la persona incorrecta es dándote tiempo para conocerla.

Silvia Llop- Libro: Mándalo a la mierda.




martes, 15 de febrero de 2022

EL AMOR PROPIO

El amor propio es la principal de las reivindicaciones que se hacen para tratar de protegerse de la devastación que provoca el amor. No está mal. Obviamente hay que cuidar la relación con nuestro mundo interior, con sus luces y sombras. Pero muchas veces me pregunto si yo me querría si nadie me quisiese. En mi caso particular además sabiendo que me quiere mucha gente. Incluso gente con la que no hablo en años sé que si mañana llamase, me atenderían. No lo voy a hacer. Porque también tengo red ahora. Diferente a la de hace 5 años y en 5 años será diferente otra vez. Con algunas personas que están siempre pero variando intensidades, frecuencias y contacto.

Vuelvo al principio ¿podría quererme si no tuviese a nadie o si la gente me tratase mal? No sé la respuesta. Es loable que haya gente que supere todas las adversidades, toda la ausencia de cariño o todo el odio de otras personas y consiga quererse pese a todo. Muy admirable. Pero no sé hasta qué punto se le puede exigir eso a todo el mundo. Quiérete, quiérete, quiérete, el amor propio, la relación para todo la vida, nadie te va a querer si no te quieres... sé que se dice con buenas intenciones. Sé también que a veces es un primer escalón para recomponer la vida. Pero si hay gente que no puede subir el primer escalón igual lo importante es que alguien le quiera para ayudarle. O para subirle.

(Álvaro Saval)