sábado, 28 de febrero de 2015

Capaz de todo...

"Voy a decirte algo que tú ya sabes, el mundo no es todo alegría y color. El mundo es un lugar terrible, y por muy duro que seas, es capaz de arrodillarte a golpes y tenerte sometido permanentemente si tú no se lo impides. Ni tú, ni yo ni nadie golpea más fuerte que la vida, pero no importa lo fuerte que golpeas, sino lo fuerte que pueden golpearte. Y lo aguantas mientras avanzas. Hay que soportar sin dejar de avanzar, así es como se gana. Si tú sabes lo que vales ve y consigue lo que mereces, pero tendrás que soportar los golpes. Y no podrás estar diciendo que no estas donde querías llegar por culpa de él, de ella ni de nadie, eso lo hacen los cobardes y tú no lo eres. Tú eres capaz de todo."


Te mereces querer y que te quieran...

B: Da asco ser una nota al margen de una historia que quieres que sea de amor y no lo será.
J: Tu escribes tu propia historia. Tu eliges tu camino.
B: Si, pero no puedes elegir a quien amas.
J: Es cierto, no puedes. Pero puedes elegir abrir la puerta de tu corazón al amor.
B: ¿Qué quieres que te diga?
J: ¿Qué te parece...Creo que tu puedes hacerme feliz? Creo que tienes miedo porque la última vez que abriste tu corazón te lo rompieron, y te comprendo. Aunque en algún punto del camino renunciaste a la idea de que mereces volver a sentirte así, no ves lo que veo yo, te mereces querer y que te quieran...


"El Alquimista", Paulo Coelho.

Siempre existe en el mundo una persona que espera a otra, ya sea en medio del desierto o en medio de una gran ciudad. Y cuando estas personas se cruzan y sus ojos se encuentran, todo el pasado y todo el futuro pierde su importancia por completo, y solo existe aquel momento y aquella certeza increíble que existe un alma gemela para cada persona. Porque sin esto no habría ningún sentido para los sueños de la raza humana.


Persona grande...

No es la altura, ni el peso, ni la belleza, ni un titulo o mucho dinero lo que convierte a una persona en grande... Es su honestidad, su decencia, su amabilidad y respeto por los sentimientos e intereses de los demás. Cuando habla de frente y vive de acuerdo a lo que habla, cuando trata con cariño y respeto, cuando mira a los ojos y sonríe... Una persona es grande cuando comprende, cuando se coloca en el lugar del otro, cuándo obra no de acuerdo con lo que esperan de ella, sino de acuerdo con lo que espera de sí misma... Algunas personas tienen valor, otras tienen precio.


Escribe una carta...

“Cuando alguien desaparece de tu vida, puede que no vayas a volver a ver a esa persona nunca más. O si podrás decirle todas las cosas que te quedan, que te gustaría decirle. Coges papel y lápiz, y escribes una carta que puede ser eterna o puede ser una palabra. Se la escribes a esa persona que se fue, pero no la mandas. De tres la doblas y la acercas a una llama y la quemas. Se la lleva el viento y se lleva un poco el dolor que llevas dentro"


Alejate...

Aléjate de ese tipo que desdice con sus actos lo que dicen sus palabras. Aléjate de ese que no sabe, que no está seguro. Aléjate de ese que hoy está y mañana quién sabe. Aléjate de ese que te intoxica de tristeza, que te hace sentirte fea, miserable, sola, poco querida. Aléjate si aparece cuando quiere; aléjate del hombre que no se pone en tu lugar, de ese que solo piensa en sí mismo. No vivas esperando, espera viviendo. Sal del auto engaño, no le mandes mensajes, él no va a cambiar por eso. Suelta, déjalo ir. No te hace feliz y lo sabes. Duele, pero más duele esperar que algo cambie, más duele hincar el dedo en la herida todos los días, más duele ese auto maltrato de andar mendigando amor. Dicen que hay que divertirse con el hombre equivocado hasta que aparezca el indicado. Yo creo que si estás enamorada del hombre equivocado, lo que menos haces es divertirte, solo sirve para sufrir. No insistas con lo que hace daño… Y entonces vas a comprender como yo, que dejándolo ir, alejándote, perdiéndolo, estás ganando.

Lauren Iungerich

"Nunca he sido la más elegante, ni la más guapa. Ni conseguí ligarme a todos los chicos que me gustaron. Pero conseguí no creerme una perdedora porque conseguí amar mi cuerpo, mi voz, mi forma de andar.... Porque siempre quise ser una ganadora, y cuando realmente deseas algo y luchas por ello, entonces tienes un objetivo en tu vída, y eres mucho más feliz".


Principe desteñido...

Porque el príncipe azul no existe, pero si existe...el mio tiene el caballo cojo.....
Porque dicen que todos tenemos una media naranja, pero se ve que a la mía la están exprimiendo....
Por ese estereotipo con el que crecimos y no existe, que hubiera sido mejor que nos hubieran dicho que los cuentos de hadas no existen en la realidad y así cuando crecemos no estrellarnos...y que simplemente hubiera aparecido un príncipe azul y sin embargo no tirarnos nuestra vida buscandolo.
Por esas mujeres a las que nos prometieron ser felices y comer perdices, pero cuando nos las comimos, estaban en mal estado y solo nos quedaba vomitar mas de lo que nos habían hecho comer.
Porque los finales felices.....no existen....solo existe creer en ti mismo y aceptar lo que te ha tocado.


Despeinaros...

Cuando ya te das por vencido y crees que encontrar a alguien que conecte contigo de verdad es imposible, cuando menos te lo esperas, cuando vas a esa cena que no te apetecía nada ir y haces el esfuerzo, cuando te quedas a tomarte la última copa aunque los pies te duelan horrores, cuando te toca sustituir a tu compañero del trabajo y hacer ese viaje insufrible, cuando te quedas dormido y llegas tarde, cuando te apuntas a un plan donde no conoces a casi nadie...es entonces, cuando no estás pensando encontrarle, y zas! Aparece! Y probablemente tú no tengas tu mejor careto, el rimmel se te haya emborronado y lleves tu camiseta más vieja. Pero allí está el. Y Siempre he pensado que eso se nota en la primera mirada, o la primera vez que le rozas la mano sin querer. Lo que viene siendo el feeling, mariposas en el estómago, fuegos artificiales, explosión nuclear en el Pacífico...llámalo como quieras. Y entonces, ya no puedes quitarle el ojo de encima. Ay! Que sonrisa más mona! Ay! Que gracioso que se le achinan los ojos al reírse! Ay! Que chiste más malo ha contado pero cuanto me río! Ay! Está mirando a esa?...Y todas esas estupideces que pensamos cuando alguien nos hace tilín.
Empezar a conocer a alguien es precioso a la par que estresante. Te sobran las ganas pero te falta la confianza, y esto desemboca en momentos embarazosos. Y poco a poco, sin darte ni cuenta, te has enamorado, de sus ojos achinados, su sonrisa y sus chistes malos. Y nadie te mira como él. Y nadie te entiende como él. Y no quieres a nadie en este mundo que no sea él. Y lo cambia todo. Sin saberlo, llevabas toda la vida esperándolo. No es el príncipe que nos vendió Walt Disney de pequeñas, pero tampoco está mal oiga! Ahora hay alguien que se preocupa por ti casi más que tú misma. Y si eres una afortunada, lo mismo te dura para siempre, y si no, pues eso que te llevas, que en la vida puede haber varios de estos.
Enamorarse lo cambia todo. Incluso tu propia opinión sobre el futuro. Tu, que ya te veías como la tía soltera guay que lleva a sus sobris al cine a ver una peli de mas de 12 años, ay gamberra! Pues no! Ahora te vas a empezar a plantear cosas como compartir agua, luz y gas con el, a ver la idea de casarte como algo mas cercano e incluso tener churumbeles. Según mi madre a esto lo llaman madurar, pero yo no lo tengo muy claro. A cambio, ya no duermes sola, cuando estés mal no te va a faltar un abrazo, el día que te veas fea el se esforzará por piropearte en exceso, de vez en cuando te sorprenderá y los días de frío ya no serán tan fríos como antes. Y eso no tiene precio, así que disfrútalo y siéntete afortunada. Porque en medio de estas cosas maravillosas vendrá algún que otro traspiés...pero no pasa nada, todo se soluciona.
¿El truco? Despeinaros el uno al otro de vez en cuando.

Autoestima...

Dañan tu autoestima haciéndote creer que no eres lo suficiente guapa o lo suficiente buena para ellos, pero en verdad estuvieron y están con mujeres que no te llegan ni a la suela del zapato.


Espejismo...

Nos creamos un espejismo pensando en que va a suceder, nos encanta que nos escriba algún mensaje, aunque sea cada cuatro días. «Estará muy ocupado. Lo importante es que se acuerda de mí», se suele pensar. Esto nos lo decimos con amargura para tratar de justificar nuestro propio comportamiento, ya que en el fondo, en la forma y en la superficie sabemos que no es así, que el amor sano encuentra sus caminos, que es entrega, que es compartir tu tiempo desde la libertad de elección, pero lo cierto es que nos conformamos con nuestra propia explicación... Es como un calmante que nos ayuda a sobrellevar la situación.



Felicidad..


Calma...

Cuando no buscas y mantienes la calma, las cosas llegan solas. Todos los gestos, por más pequeños que sean, llegan como una sorpresa a tu vida. Un mensaje de texto, una llamada, un te quiero, una aventura nueva, una persona nueva, será mucho más increíble si no la esperas. Y lo mejor de todo, es que cambiarás la decepción por la emoción.



Tonya Hurley

Se dice que caes en las redes del amor por algo. Como una piel de plátano de una de esas películas mudas, el amor puede hacerte resbalar y caer de culo cuando menos te lo esperas. Entonces, o bien te levantas de un brinco, impertérrito, o bien te quedas paralizado. Sea como fuere, ya siempre llevarás ese recuerdo contigo. El futuro dirá si es una pequeña cicatriz o una lesión permanente lo que te deja.

Cerca de encontrarte.......

Que nadie te entiende, que prefieres la soledad, que así estás mejor.
Que no quieres caer nuevamente, que ya no quieres arriesgar.
Que nadie te dá lo suficiente, ni en esta ciudad ni en este momento....



Lo que te mereces.......

Cuando un hombre ve que tiene todo lo que quiere sin estar necesariamente comprometido, piensa inmediatamente: “¿Para qué comprar la vaca cuando te están dando leche gratis?” Si él no quiere nada serio y tú sí entonces no pierdas el tiempo, te mereces algo más que un chico que no te considera como la indicada...

No arriesgas............

"Y ahora corre, gilipollas. Sal de casa, no te cojas las llaves, para qué. Coge la cartera, que la cosa no está barata para ir mendigando. Plántate en la estación y coge el primer tren que encuentres. ‘Qué le digo’, ‘Qué hago’, ‘No tendría que haber hecho esto’, ‘Tendría que haber dicho que SÍ’. Quítate esas mierdas de la cabeza. Espera a que se abran las puertas y vuelve, vuelve a correr, maldito gilipollas. Sortea a la gente, ábrete paso, empújala si hace falta, que se jodan, ellos no tienen tus ganas, ellos están muertos por dentro. Qué sabrá toda esta gente del amor. Llama a su timbre, pues claro que no puedes esperar. La puerta está abierta, sube las escaleras de tres en tres, tropiézate si hace falta. Haz ruido, mucho ruido, tienes una puta filarmónica en el pecho y no te da la gana de callarla. Allí está. Mirándote. Atónita. Qué guapa está. Cógele la cara con las manos y cómele la boca. Cómesela como si llevases meses sin desayunar. Con ella.
Eso es lo que ella piensa que harías, lo que estaría bien hacer.
Pero lo que haces de verdad es muy diferente. Te quedas mirando esa pantalla del movil, esa conversación en la que lo único que haces bien es escribir las tildes para quedar de serio. No arriesgas. Y quien no arriesga no gana. Y tu la acabas de perder. Acabas de perder aquella chica a la que conociste por casualidad y la que te dió ganas. De qué, de lo que sea pero te hizo avanzar."