Los insultos, desprecios y manipulaciones duelen tanto o más
que unos golpes pero es lo que te mereces por escribirle, por responderle,
porque eres “muy celosa”, porque “agobias”, porque solo dices “gilipoyeces”,
porque “estas mal de la cabeza”…
Mientras intenta aislarte de tus amigos y conocidos tú
piensas “es porque estoy pasando una mala época y me afecta todo más”, “no debería
haberle dicho eso”, “es mi culpa”, “es que soy idiota”, “nunca me irá bien con
nadie”… Todo es invisible a los ojos de los demás pero son tus ojos los que permanecen abiertos de par en
par cada noche y sabes que nadie te creería: “no es para tanto”, “eres muy
exagerada”, “te comes mucho la cabeza”, “tu pasa”, “es que quieres que nos
peleemos todos con él”… Los únicos testigos son silenciosos se llaman Ansiedad
y Depresión y te visitaran con frecuencia. Ni se te ocurra defenderte porque se
unirán las amenazas. Sentirás rabia, cefaleas… pero también la incapacidad de
llorar.
Muchas veces leíste lo de “No estás sola” pero siento
comunicarte que te sentirás inmensamente sola e incomprendida.
Él continuará su camino como si nada hubiera pasado como ese
hombre seguro de sí mismo y caballeroso que conociste los primeros días, tan
solo tú eres la mala y culpable de esta historia…, y tras su paso breve
pero devastador por tu vida: ¿qué queda de ti?...
(Irene González Pasadas, Psicóloga y Pedagoga).
No hay que permitir maltrato verbal, nada de nada. Es un tema que debe tocarse en todos lados para formar consciencias. Muy triste pero muy comun el maltrato psicologico. Excelente entrada.
ResponderEliminarTe invito a que pases por mi blog.
www.mujeresanasybellas.blogspot.com